Este blog está dirigido a todos los amantes del 9º arte.
No tanto a los lectores de cómics, sino más bien a los mecenas y propietarios de arte original.
Gente que visita páginas como
Comic Art Fans y que se entretiene indagando en este mundillo, únicamente por quién firma los dibujos.

Saturday, February 2, 2013

ME GUSTA TONY STARK

Si tuviera que elegir un superhéroe, elegiría a Superman.

Me pesan los años para elegir a otro.

Además, soy lo suficientemente romántico, para pensar hay Superman en cada uno de nosotros (el que tenga hijos, sabrá de lo que hablo).

Pero, cuando hay que quitarse el disfraz, la cosa cambia.

Me gusta Tony Stark.

Arrogante, individualista y sincero hasta la crueldad. Si yo fuera millonario y un genio de la robótica, sería como Tony Stark.

La vida es así. Es necesario tener un poco de maldad, y Clark Kent no la tiene.

Tampoco me gustan los personajes atormentados, como Bruce Wayne, ni demasiado ingenuos, como Peter Parker.

Tony pierde los papeles. ¡Y eso, me encanta!

Ultimate Avengers #1 - detalle de lámina 8x10. Carlos Pacheco (2009) - Colección personal.

Una vez alguien me dijo: "Aprovecha lo que tienes, y ríe mientras lo tengas. Así cuando lo pierdas, todavía te quedará la sombra una sonrisa. La de haber vivido."

¡...aunque aquí los amigos de Marvel, se la hayan borrado a Tony!






EL DIA QUE AL RIO MURIO

366 días después, no puedo evitar acordarme de Al Rio.

No entendía  aquella imagen de Supergirl llorando. No lo podía creer.
Las palabras de Terry Maltos en su página oficial lo decían todo. Señales de depresión. Ayuda.

Da qué pensar.

Un año después busco el google "Al Rio". Álvaro Araújo Lourenço do Rio (19 May 1962 - 31 January 2012)... ahí está en wikipedia. Todo lo que sabemos de él. Y, os ahorro la búsqueda, no pone nada.

El día que Al Rio murió llegaba hasta mí una lámina suya.

Beauty and the Beast. Al Rio (2010) - Colección personal.

La había adquirido unas semanas antes de Terry, su agente comercial. Un dibujo del año 2010, cuyo fin nunca llegué a conocer. No era un encargo, ni privado ni de una editorial. Un verdadero derroche de trabajo y talento, entre lápices y tintas. ¿Para qué?

Quiero pensar que a Álvaro realmente le gustaba dibujar. Al menos eso aseguraba en sus entrevistas. Nunca he leído declaraciones tan vehementes de un dibujante: "corre por mis venas", "lo es todo".

Hoy me pregunto si  hubiera tenido un fin tan trágico de no haber sido artista.

El cuento más triste hecho realidad. Adivino el terror en los ojos de Bella. Paseo por la habitación, oigo bossa nova y veo el sol desde la ventana. La vida es muy corta.